¡Ayayay!

Grito con el corazón,

El niño de gran razón,

el padre con desazón,

frenó con un tropezón,

como un frio chapuzón.

 

¡Ten cuidado con el picazón!

Que te da una hinchazón y tal vez la comezón,

 

¡Papá es solo un punzón!

Que me dio con gran dulzón,

el pequeño cabezón;

sin ánimo de ser ruin,

como si fuera del caballo la clin,

el hermoso puercoespín.

 

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